Quidditch

Estas últimas semanas nos hemos dedicado a practicar un deporte llamado Quidditch, famoso por aparecer en las películas de Harry Potter. 

 

En ese deporte, dos equipos se colocan a un lado en el campo, en el área. En cada equipo hay varias clases de jugadores: tres cazadores, dos golpeadores, un buscador y un guardián de la portería. Los cazadores son los que se encargan de meter la pelota en los aros para marcar. Sólo ellos pueden coger la pelota principal o quaffle. Los golpeadores son los encargados de coger las bludgers, con las que eliminan a los jugadores del otro equipo nada más tocarles con la pelota. Éstos, al ser eliminados, tienen que levantar el palo y correr hasta su propio área para poder volver a salir. Los buscadores son los encargados de buscar la snitch dorada, que estará escondida y que huirá de ellos. Éstos, que al principio jugarán como un cazador más, tienen que salir en su busca en cuanto suene el pitido. Y por último, el guardián se encargará de proteger los aros de su portería para que no puedan marcar. Los jugadores deben llevar un palo a modo de escoba entre las piernas. 

El partido comienza con un pitido. Los jugadores, que estarán colocados a lo largo del área, tendrán que correr a por las pelotas(tres bludgers y la quaffle), que se situarán en medio campo. El objetivo será marcar lo máximo posible, intentado que los golpeadores no nos eliminen para no perder la pelota. Si un golpeador da a otro golpeador, éste suelta la pelota; de éste modo, otro golpeador podrá cogerla. El partido lo gana el que consiga más puntos al acabar, pero, si antes de que acabe, un buscador consigue la snitch dorada, su equipo gana inmediatamente el partido, independientemente de los puntos.

En mi opinión, ha sido un deporte muy interesante, totalmente diferente a lo realizado antes, aunque también hay que decir que era muy complicado correr con la escoba, ya que resultaba realmente incómodo. Por lo demás, me ha parecido divertido.