La primera clase dividimos la clase en tres grupos e hicimos dos actividades. Una de ellas consistía en intentar llegar a cinco pases seguidos con los de tu grupo, estando solo dos equipos en el campo, y el que mas puntos consiguiese se quedaba en el campo y jugaba con el que estaba fuera. En el otro ejercicio que hicimos uno de los equipos se tenía que poner repartido por el campo y tenía que impedir que los otros dos, que estaba colocados en un área, llegasen al contrario haciendo pases con el disco volador.
El último día hicimos partidos, donde teníamos que respetar todas las reglas como que no se pueden dar más de dos pasos el jugador que tenga el frisbee, tampoco puedes estar más de cinco segundos con el o que solo puede haber una persona defendiendo a alguien.
Al comenzar el partido cada equipo tiene que estar en su área y uno de ellos saca. El saque consiste en lanzar el frisbee hacia el campo contrario y si cae al suelo sin que lo toque nadie es del equipo contrario y si lo tocan es de quien lo lanza. El objetivo de este deporte es meter punto y para ello tienen que hacerte un pase y coger sin que te caiga el frisbee en el área contrario. El equipo que ganaba era el que anotaba tres puntos o el que tuviese el máximo en los cinco minutos de cada partido.
Para mi gusto han sido unas clases divertidas aunque al principio pensé que no iba a gustarme mucho pero me equivocaba.
Teresa Ares Díaz
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